Madre sólo quiéreme
Madre tú que conoces la vida
ayúdame a conseguirla.
Tú que sabes mis desdichas
ayúdame a buscar la alegría.
Tú que entiendes mi dolor
ayúdame a encontrar el amor.
Madre ¿Me dejas entrar?
Madre ¿Me puedes ayudar?
Madre deseo querer y amar.
¿Por qué no me has de dejar?
Ayúdame a olvidarme del ayer.
Ayúdame a ser feliz.
Ayúdame a corregir errores.
Ayúdame a parecerme a ti.
Madre lo siento, perdóname,
no te he juzgado bien.
Estoy arrepentido y triste.
¿Lo crees? pues… ya lo ves,
fueron juegos puros de niñez,
olvídalos, sólo quiéreme.
Autora: María Cruz Pérez Moreno